Supongo ya conocido del lector el "Principio Antrópico", y al que en alguna ocasión me he referido de forma no muy entusiasta. En pocas palabras, y de forma muy esquemática, este supuesto cosmológico viene a decir que las cosas son como son, pues de lo contrario no estaríamos aquí para verificar que son así, es decir, sí yo sé que he nacido es porque he nacido, ya que, de otra forma, no podría saber que no he nacido al no estar aquí para confirmarlo.
Pues bien, así como en la sociedad humana el uso y fín de la ley varía según el colectivo con la que se relacione; para los jueces está para obedecerla, para los abogados para utilizarla, para los ciudadanos para evitarla ó para los delincuentes para transgredirla; de forma semejante creo que el "Principio Antrópico" podría ser criticado ó utilizado según la circunstancia. Tengo la sospecha de que algunos astrofísicos y cosmólogos siguen, de forma más ó menos directa, esta estrategia, sí no con este principio con otros, que en ocasiones pueden ser útiles para apoyar las propias teorías, y en otras, al entorpecerlas por discordantes con las mismas, para criticarlos ó incluso llegar a postular su absoluta invalidez aportando pruebas de solidez dudosa. Yo personalmente, no tengo la más mínima intención de pretender colocarme por encima del bien y del mal, y mucho menos en una disciplina como la Cosmología que, quizás por fortuna, está tan abierta a la especulación, por lo que no creo, honestamente, incurrir en u
na falta reprobable sí, llegada la ocasión, utilizo en beneficio propio el principio arriba citado, a pesar de no haberlo ponderado en comentarios pretéritos.
Dicho todo esto, pasemos a tratar el tema de la característica de nuestro Universo en función de su cantidad de materia contenida. Sabido es que la eventualidad de que el Universo sea abierto ó cerrado, es decir, con curvatura negativa ó positiva, respectivamente, depende únicamente de la cantidad de materia que se encuentre contenida en él. La frontera entre ambos tipos de Universo viene establecida por la "densidad crítica", cuyo valor de 10E-26 Kg/m3 determinaría el futuro del Universo, y en definitiva sí sería factible pronosticar un "Big Crunch" ó, por el contrario, vaticinar una muerte entrópica por adquisión de un valor inifinito por parte de este parámetro termodinámico. Dado que los valores determinados hasta ahora para la densidad media del Universo han estado muy por debajo del valor apuntado (del orden de un 1% del mismo contabilizando la materia luminosa), se ha postulado la existencia de "Materia Oscura", cuya composición se repartiría entre neutrinos, polvo estelar, agujeros negros, etc. Finalm
ente, y puesto que los últimos cálculos de la densidad media basados en datos aportados por sondas espaciales, y suposiciones más ó menos verosímiles de "Materia Oscura", cuyo descubrimiento aún no se ha producido, no han llegado a proporcionar para aquella un valor equivalente a la densidad crítica, los cosmólogos y astrofísicos se han dividido en dos grupos: por un lado, los que afirman categóricamente que nuestro Universo es abierto, y por otro, los que suponen que llegará un momento en que la tecnología aplicada a los cálculos y observaciones astronómicas permitirá llegar a establecer un valor para la densidad equivalente a la crítica, propia de un Universo plano con curvatura nula en su proyección futura.
Ahora, es cuando quiero volver al tema del "Principio Antrópico", y plantear la siguiente pregunta: ¿no será que, en efecto, la densidad media de nuestro Universo sea del mismo valor que la crítica, pero no por la propia estructura másica del mismo, sino porque nos encontremos en un "punto de inflexión" de tal forma que sea nuestra época cósmica aquella en que la curvatura del Universo pasa de un valor negativo a uno positivo?. Ya sé lo que dice la ley de Hubble, pero el valor de su constante se ha visto que es variable con el tiempo, además, y en cuanto al desplazamiento al rojo, la Relatividad General nos enseña que las concentraciones gravitatorias enlentecen la velocidad de la luz en sus proximidades produciendo las mismas consecuencias observables que el efecto Doppler, entonces ¿no podría ser que el corrimiento de las líneas espectrales no fuera debido a un efecto gravitatorio que, además demostraría una paulatina y creciente concentración másica entre el objeto observado y el observador?, de esta forma
se podría afirmar que la densidad actual es igual que la crítica, porque de lo contrario, y siguiendo el "Principio Antrópico", el "homo sapiens" no podría estar aquí para determinar ese valor, por ser demasiado pronto (curvatura negativa en un universo en expansión) ó demasiado tarde (curvatura positiva en un universo en contracción). Por otro lado, sabido es que el valor infinito no deja de ser un artificio matemático, y que desde un punto de vista físico, es un indicativo de error ó singularidad, pues bien, ya he comentado antes cual sería el fín de un Universo abierto en cuanto al valor de su entropía, y siguiendo a Einstein, me parece más correcto hablar de un valor ilimitado de esta que no de un valor infinito. Y finalmente, y aunque solo sea por no volver a caer en el pecado de antropocentrismo, que tan malas consecuancias trajo a la humanidad en tiempos que ya deberían estar pasados, un Universo abierto nos anula por completo la posibilidad de otros Universos, estaría en desacuerdo con las cosmogonías
cíclicas, incluyendo en ellas el "Eterno Retorno" de Poincaré y Ehrenfest, y solo sería consonante con la judeo-cristiana, cuyo seguimiento incondicional también llevó a la humanidad a innumerables errores que, como la historia ha demostrado, lastraron dramáticamente el camino del progreso intelectual y científico iniciado en la Grecia del siglo VII antes de J.C.
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